viernes, 2 de octubre de 2009

La vida en cinco botellas

Esta simpática imagen me la envió mi primo Domingo hace algún tiempo. A través de cinco botellas se ilustra la vida de un ser humano digamos normal de hoy día y de estas tierras occidentales. La primera y última botella nos vienen dadas por un cuidador. Y las tres de en medio pertenecen a los ciclos intensos de cualquier existencia: crecer, descubrir, apurar, rectificar y ayudar a morir.

Con el biberón crecemos a cuarto de kilo por semana y la leche es el primer huésped de nuestro paladar. La bebida de cola fomenta nuestra curiosidad por descubrir y sentirnos mayores. El alcohol supuestamente nos sube a lo más alto de nuestro ego social y económico, mostrándonos después nuestra pobre realidad. A los cincuenta comprendemos lo privilegiados que somos por haber podido amar, asumimos nuestros fantasmas y nos arrepentimos sinceramente del tiempo perdido y de las muchas veces que hicimos el ridículo; el agua es aquí nuestro cómplice. Por último, el suero suaviza el momento cruel de dejar de ser. Cinco maneras de liquidar la vida.

3 comentarios:

Dolo dijo...

Buenísimo, buenísimo!!!

TUBAL dijo...

Ja, ja,ja...si que está bien!

Manuel Casal dijo...

Esta es una preciosa imagen simbólica que nos aclara la historia de nuestras vidas.

Pero yo me paso el día rodeado de jóvenes y pensando en ellos tengo la impresión de que la tercera botella ha pasado al segundo lugar. O, quizás, que el tiempo transcurrido entre la primera y la tercera se ha reducido muchísimo.

La imagen de tu post transmite un cierto equilibrio, un ritmo armónico. No sé si la imagen de hoy estaría en muchos casos escorada a la izquierda. Y tampoco me iamgino si la parte derecha quedaría igual.